¿Sabía que cuando se implementa aprendizaje combinado los educandos involucran áreas del cerebro que pueden reforzarse, fortalecen la creatividad y agilizan el entendimiento? Alternar entre enseñanza en el aula y en línea fomenta saberes fluidos!
Ciertamente hay múltiples ventajas para transferir al aprendizaje semipresencial. Proponemos algunos lineamientos tendientes a optimizar el complemento de las clases presenciales tradicionales con planificación de clase en línea, para lograr exprimir lo mejor de cada modalidad y brindar la utilidad que retribuya en un mayor aprovechamiento del conocimiento de los estudiantes.
Piensa en grande, ejecuta en pequeño.-
Siga nuestros consejos para un óptimo desempeño complementario, para favorecer el crecimiento de su organización hacia un futuro virtualizado:
1 No duplicar: Caemos en el fácil error de creer que las clases virtuales deben sumarse a las presenciales ya diagramadas con anterioridad, con iguales contenidos y estrategias, y simplemente trasladarlas al online. Y esto no es conveniente. Lo más productivo es dividir aquellas actividades o contenido que mejor se adapte a los entornos en línea y presenciales con un cuidado especial. De lo contrario, puede caerse en el riesgo de diseñar un contenido sobrecargado de la clase, o desfazado para ser aplicado tanto en línea como cara a cara. Hay mucho para aprender en términos de creación del mejor proyecto pedagógico virtual.
2 Selección relevante: Es fundamental eligir contenido apropiado para llevar al online. No se deje llevar por las numerosas oportunidades que ofrece la tecnología. Asegúrese de que el componente en línea siga siendo significativo para el aprendizaje. Establezca qué quiere que los alumnos aprendan, y si es probable que su plataforma mejore o profundice esta experiencia. Es aconsejable pensar en profundidad el por qué de la elección de la plataforma de elearning adecuada, y si ella cubre el diseño de evaluaciones más favorables, el uso de los instrumentos apropiados, etc.
3 Actividades acordes: Establezca qué tareas o labores programadas son las que se adaptarían mejor a la modalidad virtual. Mígrelos al contexto en línea, potenciando con el uso de recursos multimedia, y luego enriquezca las actividades clave que se benefician de un entorno cara a cara.
4 Comenzar lentamente: Presente una herramienta virtual para su clase o programa combinado; sígalo de cerca y evalúe sus méritos al final del cuatrimestre; ajuste consecuentemente lo analizado; y luego agregue gradualmente más funcionalidades a lo ya existente, si es necesario.
5 Clarificar a los usuarios Transmita a estudiantes, docentes o tutores, con claridad, sobre cuáles son los beneficios y objetivos del elearning, y a otros miembros del personal docente, sobre las razones por las que se está presentando una plataforma virtual. Describa los objetivos a alcanzar y cuáles podrían ser las ganancias para ellos. Los estudiantes generalmente estarán más dispuestos a probar nuevos métodos de aprendizaje mientras sean conscientes del avance que representa para su proceso de instrucción, y esto ayudará a crear un ambiente de cooperación y comunicación entre los alumnos y sus docentes. Son muchas las tareas del tutor virtual y su labor para facilitar la productividad en el elearning.
6 Publicar ruta de aprendizaje: Orientado a que los usuarios se ubiquen en qué punto del proceso de aprendizaje se encuentran, deben observarse fácilmente las rutas del curso, y así poder ver el progreso logrado. Los informes y los paneles permiten a los administradores observar el tiempo dedicado por los alumnos, tanto en la clase física como en línea.
Entrar con el pie derecho
Algunos cursos virtuales fracasan porque se centran en repetir la misma clase tal cual se expone en el ámbito presencial, es decir, traspasar exacto el curso presencial al cara-a-cara.
Para no caer en sorpresas, lo mejor es evaluar qué actividades o recursos conviene mudar y cuáles no facilitarán la clase en caso de concretarse su traspaso.
Pensamos en su mejor organización, por ello, le brindamos una lista de algunas acciones plausibles de ser migradas del ámbito presencial a virtual, y que se adaptan adecuadamente:
- Temáticas administrativas: esquemas de clase, fechas importantes, información de contacto, políticas seguridad o de uso, listas de clases y horarios, calificaciones, preguntas frecuentes, programas, etc.
- Recursos educativos o pedagógicos, como bibliografía, resúmenes, notas de estudio, tareas interactivas, listado de lectura, enlaces web, etc.
- Documentos de procedimiento: como síntesis de proyectos, criterios de evaluación, demostraciones, tutorial de uso del campus, etc.
- Evaluaciones: No todas las variantes de exámenes son factibles de ser trasladas al online. Además de los test de multiple choice, existen muchas otras posibilidades, como pruebas interactivas con multimedia de Adobe, que son de gran utilidad.
- Retroalimentación: los docentes pueden enviar audios o indicaciones escritos a sus alumnos, lo cual mejora la concientización de alumnos hacia visualizar qué tienen que reforzar en su aprendizaje; además, comentarios de los compañeros.
- Colaboración: discusiones en foros, trabajo en grupo, wikis, etc.
- Trabajo de preparación: recursos que los estudiantes pueden usar con el fin de prepararse para las clases cara a cara.
- Noticias: instrucciones semanales, notas motivadoras del profesor o novedades destacadas.
- Participación externa: profesores o invitados visitantes, aportes de personas valiosas o colaboradores, o de instituciones ubicadas en otros estados o países, participantes de la industria, etc.